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4 ago 2017

La cera de los oídos

Todos los oídos tienen cera, algunos más que otros, claro está. Aunque a la mayoría la cera no nos causa ninguna incomodidad, pero algunas personas es un verdadero problema, sobre todo por los tapones que se pueden generar. Así que para no perder la costumbre de hablar de cosas no muy agradables a la par que fascinantes, hoy hablaremos del cerumen.

Partes del oído
Fuente: http://comofuncionaque.com
El cerumen se fabrica en el conducto auditivo externo, la zona que va desde el pabellón auricular y el tímpano. Se compone de una mezcla de secreciones producidas por las glándulas sebáceas y por las glándulas sudoríparas, entre las que destaca el colesterol, además de otros lípidos. Como ya sabréis, la función básica de esta sustancia es proteger y limpiar el canal auditivo externo, ya que este es el que se encuentra en contacto con el exterior, de modo que cuando sale hacía fuera, lo que encontramos es que, además de lo anteriormente descrito, también se van a mezclar células muertas, bacterias, polvo y cualquier cosa que se nos haya metido por ahí. Así mismo, se ha visto que posee propiedades antimicrobianas, tanto por tener incluidos anticuerpos, como por su pH relativamente bajo, de 6'1 aproximadamente.

¿Y cómo es que la cera sale hacia fuera? La limpieza del canal auditivo ocurre como consecuencia de un proceso similar al de una cinta transportadora. Las células epiteliales que se forman en el tímpano emigran hacia fuera a través del conducto auditivo, y en su transporte arrastran el cerumen hacia el exterior. Además, el movimiento del maxilar ayuda a este proceso, ya que desprende el material que pueda quedar incrustado en las paredes. 

De todos modos, la composición del cerumen es muy variable, por lo que se pueden diferenciar dos tipos claramente diferenciados: el tipo húmedo y el tipo seco. En este caso, el tipo de cera que tenemos viene determinado por un solo gen, el ABCC11, que se rige por una herencia monogénica y con carácter dominante (como la de los guisantes de Mendel). El tipo húmedo corresponde al alelo dominante y, por ello, es el más extendido entre la población, que se encuentra en la población caucásica y africana. Mientras que el alelo recesivo da lugar a un tipo de cera más seco y oscura, que es más frecuente en la población asiática y en los nativos americanos. Tales son las diferencias, que los antropólogos han sido este rasgo para rastrear migraciones, como las de los esquimales. 

Los tapones de los oídos y los bastoncillos

Fuente: http://www.drmoina.com.ar

Esto que veis a la izquierda es un tapón de cera tal y como se ve con un otoscopio. El trayecto del conducto auditivo externo no es recto (como se muestra en la mayoría de esquemas), sino que se estrecha en su trayecto medio, de manera que dibuja una forma «en reloj de arena». Esta especial morfología, que protege al tímpano de agresiones directas, a la vez favorece que cualquier cuerpo extraño o que los tapones de cerumen queden con frecuencia enclavados. Tener cera acumulada no es un signo de higiene deficiente, si no de que el cuerpo fabrica mayor cantidad o que nos cuesta más expulsarla y tiende a quedar en el conducto auditivo. La práctica habitual de sacarla mediante bastoncillos de algodón fomenta el enclavaje del cerumen impidiendo su eliminación natural, siendo una de las causas más comunes de la formación de tapones.

Una vez formados los tapones de cera debe sacarlos un profesional sanitario. En muchos casos se recomienda primero reblandecerlos unos días con algún preparado, como el agua oxigenada, por ejemplo. Aunque hoy en día está en entredicho que esto sirva para algo. Una vez reblandecido, se puede extraer con una irrigación o con pinzas. Lo más importante es saber que si hay un antecedente de perforación timpánica es peligroso meter líquidos en el conducto auditivo.

Frikidato:

- Así como para saber la edad de los árboles contamos sus anillos concéntricos, en las ballenas hay una determinada producción anual de cerumen que en estos animales se acumula formando capas y ayuda a determinar la edad del cetáceo.


Fuentes:

4 ene 2015

El temible ataque de los mocos verdes

Hay retazos del conocimiento popular que no pasan de moda y uno de ellos viene de la mano de invierno y los resfriados: "Si los mocos son verdes, hay que poner antibióticos". Como en la mayoría de los dichos, siempre hay algo de verdad, aunque normalmente esa verdad es parcial o está malinterpretada.

El moco es una sustancia compuesta por un 95% de agua, un 2'5% de proteínas y un 2% de minerales (así explicado no parece tan asqueroso). Entre las proteínas que lo forman, las más importantes son las glicoproteínas, que retienen agua y dan al moco su característica viscoelástica, y los anticuerpos. Las creadoras de esta mezcla son las células caliciformes que se encuentran en la mucosa nasa, que nos ayudan a mantener la cavidad húmeda y limpiar y calentar el aire que debe llegar a los pulmones. 

Normalmente el cuerpo produce entre 750-1000 ml de moco al día, pero la mucosa lo va eliminando desplazándolo hacia el tubo digestivo sin que seamos conscientes (en el fondo todos nos comemos los mocos, hasta la Presley). Cuando cogemos un resfriado, cuyo culpable suele ser algún rinovirus en la mayoría de los casos, se produce tal inflamación en las vías respiratorias que el drenaje continuo de mucosidad se entorpece y el organismo intenta eliminarlo hacia el exterior.

La mucosidad generada en un resfriado suele ser transparente (ya que, al fin y al cabo, se trata básicamente de agua, como explicamos al inicio). Lo que sucede cuando encontramos ese color verdoso es que, aunque el resfriado sea un proceso vírico, siempre puede haber bacterias que intentan aprovechar la situación. En este caso, algunos de nuestros glóbulos blancos, los neutrófilos, están especializados en fagocitar (tragar) bacterias. Los neutrófilos digieren las bacterias en su interior con una serie de sustancias, entre las que destacan las peroxidasas, que trabajan produciendo radicales libres, lo que básicamente mata a la bacteria y, de paso, al neutrófilo.

Las peroxidasas son enzimas que necesitan hierro para funcionar correctamente y es este hierro el que, en sus diferentes estados de oxidación, da al moco ese color verde tan asqueroso.

En conclusión, el color verde que podemos observar a veces en los mocos se debe a la destrucción de bacterias durante el resfriado, pero esto no significa ni que el resfriado sea de origen bacteriano ni que sea necesario introducir antibióticos.

Frikidato

- ¿Por qué no tenemos inmunidad frente a los resfriados? 
Lo normal es que una persona adulta y sana pase 2-3 resfriados al año de media. Los virus causantes de los resfriados, casi todos son rinovirus y coronavirus, forman en realidad una familia de más de 200 miembros, y a su vez, existen muchos subtipos de cada variedad, por lo que conseguir una inmunidad efectiva es prácticamente imposible.

10 nov 2014

¿Cómo deforma la nariz la cocaína?

Por todos es conocido que uno de los estigmas más claros de la adicción a la cocaína es la deformación gradual de la forma de la nariz. Hoy veremos cómo y por qué se produce este fenómeno. 

La cocaína es una sustancia que, entre otras características, tiene efectos vasoconstrictores (disminuye el flujo de los vasos sanguíneos), por lo que al ser esnifada reduce la cantidad de aporte sanguíneo de la mucosa nasal. De este modo, el consumo prolongado primero produce úlceras, ya que las células van muriendo por déficit nutricional, y van dejando a la intemperie el cartílago del tabique nasal. El cartílago no tiene vasos sanguíneos propios, sino que debe ser nutrido por la mucosa que lo recubre. Así que inevitablemente, el cartílago también se perfora por necrosis. 

Por si esto no fuera suficiente, también tenemos que tener en cuenta que, tras este efecto vasoconstrictor de la cocaína, el cuerpo produce un efecto rebote con una gran vasodilatación de la zona para compensar la isquemia. La vasodilatación da lugar a rinitis (con sensación de que la nariz nos moquea) y algunos consumidores palían este molesto efecto con gotas intranasales, que casualmente también son vasoconstrictoras (aumentamos el efecto, ya producido por la cocaína).

Una pequeña lesión en el tabique puede ser totalmente inperceptible, como mucho puede provocar que la persona note una especie de silbido cuando inspira aire (porque al haber una perforación que comunica ambas fosas nasales se crea una turbulencia de aire). Cuanto meyor sea la perforación, mayor y más molesta se puede volver esta turbulencia. Además los bordes de la perforación son muy frágiles y sangran fácilmente; por no hablar de la aparición de costras recurrentes, dolor o infecciones recurrentes de la zona...

El tabique nasal es el pilar del dorso nariz, de manera que el afectado pierde gradualmente ese apoyo y la nariz se hunde ("nariz de boxeador"). También la punta de la nariz cae por falta se sustento.

Fuente: http://www.perforatedseptum.com/perforated-septum-treatment/

El consumo necesario para que esta lesión aparezca no se encuentra bien estimado, podría ser entre unos pocos meses y varios años; depende del cuerpo de cada uno, la frecuencia del consumo, los adulterantes de la droga y el uso de sprays nasales.

En estos casos el único remedio es una intervención, siempre con la idea de que el paciente haya dejado la droga. Las pequeñas perforaciones (menores de 2 cm) se cierran sin problemas, pero pasados los 2 cm la intervención se complica, ya que debe realizarse en varias etapas y no siempre se consigue un cierre total del defecto.


Fuentes:
- Vallés Varela, H. Lecciones de Otorrinolaringología. Universidad de Zaragoza. 2012.

11 mar 2013

¿Por qué inhalar helio nos cambia la voz?

Esta pregunta me la hicieron hace poco tiempo, en ese momento en que en las celebraciones se acaban las conversaciones normales y, ya que hay un médico en la sala, alguien con inspiración filosófica decide dar un giro intelectual a la noche. Y ya que me esmeré buscando una respuesta, creo que a los lectores les podrá interesar también.

Para comprender este fenómeno recurriremos a unas nociones sencillas sobre qué es el sonido. Las ondas sonoras se forman por la vibración de algo (pongamos las cuerdas vocales) en un medio (como el aire, por ejemplo). Cuando las cuerdas vocales se mueven, desplazan las moléculas de gas de su alrededor contra otras moléculas de gas y se genera un movimiento vibratorio que nuestro cerebro traduce en lo que conocemos como sonido. 

Todos los gases tienen el mismo número de partículas por unidad de volumen, para una misma temperatura y  presión, independientemente del gas del que estemos hablando. Pero no todas las moléculas de gas tienen la misma masa, por lo que la densidad del gas cambia. El nitrógeno (principal componente del aire que respiramos) tiene una masa unas siete veces superior a la del helio, por que la densidad del helio es mucho menor y las ondas sonoras pueden viajar más rápido. A 20ºC, el sonido viaja a 927 m/s a través del helio y a 344 m/s a través del aire. 


                                                                     

Cuando la onda viaja más rápido (ν), también aumenta la longitud de onda (λ), sin necesidad de variar la frecuencia (f), por lo que en realidad la voz no se vuelve más aguda (cosa que sucedería a mayor frecuencia), sino que cambia el timbre. El timbre es la cualidad del sonido que permite distinguir dos sonidos de igual frecuencia e intensidad emitidos por dos fuentes sonoras distintas. Me gusta remarcar este punto porque las cuerdas vocales vibran a la misma frecuencia, es decir, emiten el mismo número de vibraciones por segundo, tanto si respiramos aire como si respiramos helio, ya que este último rasgo viene determinado por la longitud y grosor de las cuerdas vocales, que varía bastante ente hombres y mujeres.

¿Es malo para la salud?

No pasa nada por dar una o dos inhalaciones de helio de un globo para hacer la broma de la voz. Si bien hay casos de lesiones cerebrales por helio, estas son debidas a inhalaciones prolongadas, pues el cerebro necesita oxígeno para sobrevivir, o embolias de gas por inhalar helio a través de un tanque presurizado (por favor, inhalad del globo, no de la botella de donde lo habéis hinchado...).

De hecho, algunas pruebas de capacidad pulmonar se realizan mediante la inhalación de una mezcla de helio y oxígeno.

1 feb 2013

Tiene narices la cosa...

En pleno invierno no puede faltar en cualquier blog de medicina un post sobre mocos, resfriados o similares, y como el tema de la gripe ya empieza a estar un poco resobado, pues hablaremos hoy de narices. Narices de bebés, narices con mocos y narices de cuento.

¿Es cierto que los bebés solo saben respirar por la nariz?

Sí, los bebés no tienen la capacidad de respirar correctamente por la boca debido a la anatomía propia de su edad. Tienen una boca muy pequeña ocupada casi por completo por una lengua que comparativamente es muy grande, de manera que poco espacio les queda para nada más y la lengua suele ocluir gran parte de las vías aéreas dentro de la cavidad bucal. Además, la laringe de los bebés tiene una posición muy alta, respecto a la de los adultos, con lo que su epiglotis (el cartílago que abre y cierra la laringe para evitar que los alimentos se cuelen por la vía respiratoria) se puede superponer al paladar blando durante la deglución, permitiendo que el niño respire y trague a la vez sin ningún peligro.

Cuando los bebés se resfrían lo pasan francamente mal, la boca es la única alternativa. Para optimizar ese espacio bucal tan pequeño recurren al llanto continuado; esta técnica les permite ampliar la cavidad y, lo que es más importante, llorar hace que generen la suficiente presión para que el aire entre en un espacio tan reducido.

No es hasta los seis meses de edad cuando los niños pueden empezar a usar la boca como alternativa para respirar de manera normal, ya que los músculos de la lengua, la cara y el paladar se desarrollan en las proporciones adecuadas y la epiglotis se desplaza hacia abajo para separarse del paladar blando. Esta modificación de la posición de la epiglotis y la laringe aumenta el riesgo de que los alimentos se introduzcan en la vía respiratoria accidentalmente, pero también es la responsable de la formación de las vocales y en parte de que podamos hablar.

Aquí os dejo un vídeo de Youtube sobre los cambios en el aparato fonatorio y bucal que permite entender mejor lo descrito arriba.



¿Por qué cuando estoy resfriado primero me noto un orificio nasal más obstruido y luego el otro?

Este hecho curioso no hace más que poner de relevancia algo de lo que no somos conscientes cuando no estamos resfriados: las fosas nasales se alternan en ciclos respiratorios. El flujo de aire que pasa por ambas fosas es asimétrico y alternante, siguiendo cambios de congestión de la mucosa (a mayor descongestión, más flujo aéreo por esa fosa) que se alternan espontáneamente varias veces al día. Estos cambios de resistencia son recíprocos e inversos, de modo que el flujo total de aire no cambia y nosotros no notamos nada. La cosa cambia cuando nos resfriamos, ya que el ciclo no cambia y notamos que los mocos nos molestan en la fosa que permite pasar más aire.

¡Cuidado con los descongestionantes que se venden en las farmacias! Alteran el ciclo normal de vasoconstricción y vasodilatación de la mucosa nasal y si se abusa de ellos se puede notar un efecto rebote de mayor congestión nasal que hace que la gente los use de manera recurrente, pudiendo llagar a una verdadera adicción.

¿Qué es el efecto Pinocho?

Cuando mentimos no nos crece la nariz, pero el aumento de adrenalina y noradrenalina desencadenado por la mentira aumenta el flujo sanguíneo hacia la cara, por lo que se inflama la mucosa nasal, que produce una molesta sensación y la poco reprimible necesidad de rascarnos. Este es el motivo por el que se opina que una persona que se toca repetidamente la nariz en un momento determinado puede estar mintiendo.

3 ene 2013

Laringuectomías, traqueotomías y compañía

Hoy hablaremos de agujeros en la garganta. Todo agujero que se realiza en el cuerpo para comunicar un órgano con el exterior se llama estoma (que significa boca en griego); esta técnica se puede realizar en el colón y da lugar a un colostoma, en el estómago y es un gastrostoma, o en la tráquea y tendremos un traqueostoma. Toda persona que veáis con el típico agujero en el cuello tiene un traqueostoma al que se le incluye una cánula para que no se cierre, pero detrás de él podemos encontrar dos cirugías muy distintas: la traqueotomía y la laringuectomía.

Con la traqueotomía, se realiza un orificio entre el segundo y tercero cartílago de la tráquea para conectarla con el exterior y permitir el acceso del aire salvando el tracto respiratorio superior. Esta técnica no elimina ninguna parte de las vías aéreas, de modo que si la persona se tapa el agujero puede hablar con toda naturalidad, ya que sus cuerdas vocales no han sido eliminadas. Hay que evitar confundirla con la coniotomía (lo del boli bic que se ve en la televisión), en que el corte se hace en la membrana que se encuentra entre el cartílago tiroides (el de la nuez) y el cartílago cricoides (que es el previo a la tráquea). Esta es una maniobra de emergencia que usamos por ser más rápida y requerir menos habilidad que la traqueotomía, aunque nunca es una solución definitiva, sino simplemente una forma de ganar tiempo hasta poder entrar en quirófano a realizar la traqueotomía.

La laringuectomía es la extirpación de la laringe, junto con la parte superior de la tráquea y la parte inferior de la faringe. La tráquea se conecta a la piel con un estoma y, a partir de ese momento, será la única vía por donde la persona podrá respirar, mientras que la boca y las fosas nasales quedan unidas solamente a la vía digestiva, por lo que no pueden atragantarse. En este caso, la pérdida de la voz es inevitable, ya que las cuerdas vocales residen en la laringe.

¿Pueden hablar las personas sin laringe?

Una laringuectomía es una cirugía a la que puede costar acostumbrarse; el aire que respiramos ya no entra por las fosas nasales y, como es más frío y no está humidificado, se produce más moco y se cogen más infecciones respiratorias, sobre todo al principio. También puede aparecer estreñimiento porque para defecar solemos hacer aumentar la presión torácica cerrando las cuerdas vocales completamente (maniobra de Valsalva). Pero, sin duda, lo que preocupaciones provoca es la pérdida de la voz, aunque hay tres métodos básicos que pueden ayudar a volver a comunicarse.

El primero y más simple es el habla esofágica o erigmofonía, que consiste en llenarse la boca de aire, pasarla al esófago y emitir el sonido cuando lo echamos fuera, de forma parecida a un eructo. El sonido se produce al hacer vibrar la zona de unión de la faringe y el esófago. No es sencillo realizar los sonidos deseados, ya que hay que aprender a controlar muy bien los movimientos bucales y linguales, pero tras algunos meses de logopedia, se puede lograr un habla bastante comprensible. Y además, es el único método que no implica tener que volver a pasar por quirófano. También es importante no respirar mientras se habla, puesto que el sonido que produce el estoma al expulsar el aire espirado impide que se entienda bien lo que se dice, por lo que no se pueden emitir frases muy largas sin pararse para volver a respirar.





El segundo mecanismo disponible es una variante del anterior, el habla traqueoesofágica, que se genera si el cirujano crea una fístula (trayecto) que comunique la tráquea y el esófago y dejando una prótesis especial que impide tanto que la fístula cicatrice y se cierre como que  el alimento o saliva pasen a las vías respiratorias.

De esta manera, el aire que entra en los pulmones produce vibraciones en la unión faringoesofágica, siempre y cuando la persona cierre el estoma para obligar a que el aire circule hacia la boca y tenga cuidado con la articulación de boca, labios y lengua para elaborar los sonidos que desee. Este método no requiere tanto trabajo de aprendizaje como el primero y el sonido conseguido es el más parecido al laríngeo de los tres, pero aún tenemos el problema de que se deben hacer bastantes pausas para respirar.





Y tenemos un último método más sofisticado que es la laringe artificial. Este dispositivo electrónico se coloca bajo la piel del cuello y genera vibraciones (la misma función que hacen las cuerdas vocales) que permiten elaborar el sonido a partir de los articulación de los músculos fonatorios del paciente. No requiere grandes cuidados ni una curva de aprendizaje, solo acostumbrarse a su uso, pero la voz tiene un sonido robótico, aunque se entiende muy bien. Respecto a los anteriores, sí permite frases más largas y sin pausas porque la vibración no depende del paso del aire respirado sino de las vibraciones del propio aparato.




Fuentes:
  • Morera, C. Marco, J. Lecciones de Otorrinolaringología aplicada. Ed. Glosa. 2006
  • Poch, J. Otorrinolaringología y Patología Cervicofacial. Ed. Panamericana. 2006




22 dic 2012

¿Qué es eso? Las amígdalas crípticas

Las amígdalas, como el resto de nuestro cuerpo, pueden tener un aspecto muy variable; las hay enormes, las hay que apenas se aprecian y también algunas personas tienen unas amígdalas muy características, con grandes agujeros, como si fuera un queso de Gruyère, parecidas a las que os muestro a continuación.



Por extraño que parezca, el aspecto de estas amígdalas es una variante de la normalidad. Las amígdalas de todo el mundo tienen criptas, pequeñas invaginaciones que están conectadas formando un sistema ramificado que es necesario para la función inmunológica de la amígdala. Lo que sucede es que, generalmente, son lo bastante pequeñas para pasar desapercibidas. Si bien antiguamente se pensaba que esta era una consecuencia de infecciones amigdalares repetitivas, hoy tendemos a considerar que se trata de una marcada actividad inmune por parte de la glándula.

Por si mismas, las amígdalas crípticas no son una enfermedad, pero el hecho de tener unas criptas tan grandes puede ayudar a que restos de alimentos se queden depositados en su interior, generando mal aliento, faringitis o incluso piedras (formadas por una mezcla de restos de comida, células muertas, bacterias y calcio). Por estos motivos, quienes tienen estas amígdalas deben cuidar con especial atención su higiene bucal.

Antiguamente, las amígdalas crípticas eran motivo suficiente para entrar a quirófano para eliminarlas. Por suerte, cada vez se perfilan mejor las indicaciones para esta intervención y muchos os habréis dado cuenta que las pasadas generaciones eran operadas con mayor frecuencia que ahora; actualmente solo se sacan este tipo de amígdalas cuando provocan infecciones o piedras de manera repetitiva y casi nunca antes se realiza antes de los 3-5 años (salvo que sea un caso tan complicado que no quede otro remedio). Y recordemos que extirpar la amígdalas no hace que bajen las defensas, ya que la faringe tiene otros focos de tejido linfoide que pueden suplir las funciones de las amígdalas.

Frikidato

Tras una amigdalectomía, el aspecto de la herida puede espantar un poco al paciente y también al médico novato que no la haya visto antes. La fibrina que la recubre le da un aspecto un tanto sucio, pero que desaparece con los meses.

Fuente: http://en.wikipedia.org/wiki/File:Tonsillectomy09.jpg